

Este libro recupera el vasto recorrido fotográfico de Juan Enrique Bedoya (Lima, 1966) hasta la actualidad. Está organizado cronológicamente, desde sus iniciales retratos de personas marginales en los años 80 hasta sus imágenes de una “arquitectura sin arquitecto”, construcciones vernáculas de una belleza a menudo sobrecogedora que expresa el genio de un lugar y de sus habitantes, así como carteles y otros signos de las carreteras, entre tantos otros objetos y paisajes que capturan su atención.
Las fotos van acompañadas de textos del propio artista donde reflexiona no solo sobre su medio expresivo –la fotografía–, sino también sobre su infancia limeña en la década de 1970, su incursión en el periodismo gráfico, su participación en la creación de espacios donde desarrollar la fotografía creativa, sus viajes por Perú y otros países.
Asimismo, se reproducen textos de Jaime Bedoya, Oscar Malca y Rodrigo Quijano, que se detienen sobre aspectos particulares de estas imágenes.
Los doce capítulos del libro organizan de modo cronológico esta abigarrada producción fotográfica y textual. La concisa presentación de Alexis Fabry destaca la gestación de este libro y la fuerza del vínculo de Bedoya “con la cultura popular de su país […] y su empeño en obviar las jerarquías, en ver el mundo «en lo grande y en lo diminuto»”.
Este libro se publicó en coincidencia con la muestra homónima en Fundación Larivière (julio a octubre 2025).